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martes, 2 de noviembre de 2010

CON MOTIVACIÓN LA AVENTURA NUNCA PUEDE FRACASAR. "NANOS"


Como cada semana, un plan teniamos que hacer, aprovechando el puente de noviembre, una cosa clara si que teniamos, queriamos pasar la noche en la montaña. 
Teniamos informacion sobre el sitio y sobre los autobuses, solo teniamos que hacernos de un material especifico para hacer una via ferrata y para poder dormir en un refugio. Un dia antes fuimos al BTC la ciudad de las tiendas aqui en Ljubljana, en busca de unos mosquetones para engancharnos a la via con toda seguridad y un aislante que nos protegiera del frio en caso de que durmieramos en el suelo, los sacos ya nos lo prestaba Dejan, y el cordino ya lo teniamos de otra ocasion.
Sin más, cada uno a su casa a preparar el macuto para la salida.

VIPAVA
Es sabado y tenemos que coger el autobus de las 8:30 hacia Vipava, Un pueblo cercano a Nanos (la montaña elegida), hora y tres cuartos de camino y ya podriamos ver con nuestros ojos el lugar elegido.

MAPA DE NANOS

Como siempre, lo primero que hacemos al bajarnos del autobus es buscar una oficina de turismo, ya que hemos visto que sirven de gran ayuda, y que ademas las encontramos facilmente en cada localidad a la que vamos. Allí, siempre una persona nos atiende y nos regala la herramienta mas valiosa de toda la aventura, un mapa de la zona, el cual nos saca de la duda que más nos puede preocupar... el lugar donde estamos.

Con el mapa en la mano, marcamos nuestro trayecto, las ideas iniciales cambian tras la interpretación del mapa, ya que elegimos ir por un sendero hasta donde esta el refugio, evitando hacer la via ferrata que teniamos pensada, porque parece estar lejos de donde estamos. Cuando comenzamos, preguntamos a una mujer que bajaba por ese sendero que nosotros habiamos pensado coger, y ella nos hizo cambiar de idea, nos aconsejo que fueramos hasta el inicio de la via ferrata que solo teniamos que andar dos kilometros y que nos gustaria mucho mas. Nosotros no lo dudamos, nos lo estaba diciendo una señora que parecia que sabia muy bien lo que decia, tiramos hacia ese lugar y alli nos preocupaba otra cuestion, "las horas de luz".

LA PARED QUE SUBIMOS

Teniamos clara muchas cosas, pero habia algo que no, habiamos salido con menos tiempo que otros dias y por ningun lado encontrabamos el tiempo estimado que se tardaba hasta nuestro destino, asi que, aprovechamos para preguntar a un grupo de eslovenos que bajaban de la montaña, ellos nos dijeron lo que tanto queriamos escuchar, que se tardaba dos horas y media, con lo cual teniamos tiempo sufiente, para hacerlo y para disfrutarlo.



EL NUDO


Con confianza y con ganas fuimos a por ella, nos equipamos como mejor pudimos, nos hicimos el gran nudo que nos enseñaron en clase, sacamos nuestros mosquetones y ademas nos pusimos una cinta aparte por si acaso la necesitabamos, el casco es una cuestion pendiente, pero la confianza nos daba seguridad y nada malo podia pasar.

EQUIPADOS



Solamente nos quedaba seguir las señales, es dificil perderse por estas tierras... llegamos a la via ferrata, y comenzamos!! sus paredes verticales, nos hacian ver que eran de una dificultad más alta a la primera que hicimos con la clase, pero que a la vez no tendriamos ninguna dificultad para hacerla.




VISTAS DESDE LA VIA

Poco a poco ibamos ganando altura, a cada pocos paso el girar el cuello te enseñaba una nueva panorámica del lugar donde estabamos, si mirabamos para atras, veiamos esa eslovenia verde que tanto nos gusta, si mirabamos hacia el lado, teniamos a compañeros escalando en grupo en una situacion envidiable y si mirabamos para arriba era para recordarnos que teniamos que continuar. En mitad de la pared, sin saber cómo, un puentecito, nos invitaba a parar, un banco artesanal y una roca curiosa nos acogieron por unos minutos... las vistas ni os cuento!!
Al poco tiempo, acabamos con la via y entramos en un sendero donde aparte de nosotros tambien transitaban otras personas, a las cuales admirar, ya que con su edad, iban a un paso... que no veas, les perdias el rastro con un facilidad increible.

DESCANSITO EN EL PUENTECITO

EN GRANDISKA TURA

Un rato duro, subiendo el sendero, el cual a veces nos ponia pruebas similares a las de la via ferrata, pero con motivación, sin pereza, reponiendo fuerzas con nuestros super tés, animándonos... llegamos a Grandiska Tura, nuestra primera cumbre en Eslovenia, 761m según la pintura de ese lugar, 793 m segun el mapa de la comarca que tengo colgado en mi habitación, pero que más da, estabamos alli, en una cumbre, habiamos llegado a la mitad del recorrido, y allí estaba esa cajita con su cuaderno y su sello, el cual nos alegra tanto encontrar... firmado y recordando a los eslovenos quiénes somos, de dónde somos y qué hicimos.
Con la autoestima subida, tiramos pa´lante, ahora si, a un ritmo un poquito mas elevado, ya que el tiempo corria y las horas de luz se agotaban, con ganas de llegar a nuestro destino y saber por fin donde dormiriamos. Pasamos por una y por dos casas pensando que ese era nuestro destino, y no eran, teniamos la esperanza que a la tercera  fuera la vencida y asi fue, Abram aparecio ante nuestros ojos... la sonrisa acompañandose de un suspiro fue el gran saludo, no podia haber sido mejor momento, habiamos llegado justo cuando una gran niebla se estaba poniendo.

ABRAM

Ya estabamos alli, solo nos quedaba saber donde dormir, no acercamos a lo que parecia un refujio y de alli nos mandaron más abajo, más abajo nos encontramos a un señor que cortaba hierba al que preguntamos, él nos contesto lo que no queriamos escuchar, lo que no nos imaginabamos, ya que abajo, antes de salir nos dijeron que estaba abierto, este señor nos dio la mala noticia de que estaba cerrado.
Un pequeño disgustillo, que no se si por magia o por ilusion... pero no se convirtio en lo que podria haber sido un gran problema o un gran agobio. Estabamos tranquilos, sabiamos que como última opcion, Dejan podia recogernos con su coche, el vivia cerca de este lugar, y en donde estabamos accedian coches. De echo muchos coches pasaron por alli desde que llegamos y con los cuales podiamos haber echo algun trato, pero no!! nuestro plan era dormir en la montaña, veniamos equipados, y tenia que ser asi.

NUESTRO REFUGIO IMPROVISADO

PEQUEÑAS REFORMAS
Al poco tiempo, Juanmi tiene un reflejo, observa un agujero de hormigón, piensa en verlo, entra con su frontal, y deduce que eso puede ser un gran sitio, seguimos buscando otro lugar, pero a los pocos pasos, una conversación entre él y yo, nos hace decantarnos por ese lugar, sería una nueva experiencia, teniamos ganas de vivir algo nuevo, y como teniamos ganas... nada podia salir mal!. Volvimos a nuestro agujerito y empezamos a equiparlo, barrer las hojas y piedrillas que tenia el lugar, sellar las corrientes de aire con material de nuestras mochilas, inflar nuestros aislantes a pleno pulmon, cambiarnos de ropa para evitar la humedad que habiamos cogido durante el dia y meternos en el saco para comer calentitos la ensalada de pasta que hacia tiempo que nos estaba esperando.
INSTALADOS
Eran las 6 de la tarde y ya queriamos dormir, el dia habia sido duro y nuestros cuerpos lo agradecerian, cuando todavia estoy calentandome los pies, escucho a mi compi como empieza a roncar, una pequeña envidia me empieza a entrar, yo quiero dormir igual de profundo que él, tras un porron de vueltas consigo conciliar el sueño hasta las diez de la noche, cuando la vejiga me da un ultimatum, y tengo que salir a mear.
Despertamos durante un rato, y de momento, vuelvo a caer, ahora si, hasta las ocho de la mañana, pasando un frio considerable entre 3 y 5 de la mañana, pero muy contenta de estar donde estaba.
La mañana nos recibia con lluvia moderada, la esperanza de que dejase de llover duro unas dos horas, cuando vimos que no queria parar, decidimos andar con ella. Por el bosque no parecia que llovia, los arboles nos protegian, pero mas abajo, nos adentramos por un sendero muy muy estrecho, el cual fue el colmo, el rozar las piernas con la hierba fue el mayor chaparron del dia, llegue a Vipava calaita, las zapatillas sonaban en cada paso que daba de lo calas que las tenia, pero al fin llegamos, tras una bajada interminable y pequeños pero no graves resvalones por las rocas mojadas. Sanos y salvos nos dirigimos a tomar un cafe calentito al primer bar que encontramos, alli mismo, me quito el pantalon y lo tiendo, las mallas que llevo debajo tambien las tengo calas, Juanmi me da unos calcetines que me vienen al pelo, pero en el bar un fallo! no tiene secador de manos en el servicio y tampoco tiene calefactores por el bar. Me temo que voy a estar mojada bastante tiempo.
LA QUE NOS MERECIMOS
Llamamos a nuestro gran anfitrion Dejan, para que nos informe de los proximos autobuses hasta Ljubliana, para hacer tiempo nos tomamos una cervecita bien merecida y al llegar a la parada alli no pasa ni un autobus, los niños que hay alli nos dicen que el siguiente es a las seis y media, y ahora son las 3 y media, un nuevo jarro de agua fria, intentamos tomarnoslo lo mejor posible y decidimos volver al bar a tomarnos otra cerveza y comer algo, en mi existe una intranquilidad, tenemos que llamar a Dejan, me extraña que el se equivocara en la hora del bus.
Llamamos a Dejan y nos dice que el no se ha equivocado, que el autobus sale dentro de cinco minutos, que habian cambiado la hora!!, con la cerveza a media, corriendo corriendo, nos ponemos chaquetas, zapatillas y de to y corremos a la parada, justo a tiempo, podemos montarnos en el autobus, y llegar a casa a una hora considerable.
Por el camino una gran sonrisa, no hemos tenido que esperar mucho, ahora estamos deseando llegar y compartir esta aventura con vosotros, nuestros seres queridos, compartirlo con esas personas que disfrutarian tanto haciendo lo mismo.



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